Efectos secundarios del cáncer: diarrea

La diarrea es la evacuación de 3 o más deposiciones no sólidas al día. Puede producirse como consecuencia del efecto de la quimioterapia o la radiación sobre el intestino o bien por gastroenteritis, intoxicaciones, insuficiente digestión o efecto laxante de fármacos y edulcorantes, entre otros. 

En el caso de personas con cáncer evitar la deshidratación y/o la desnutrición son por tanto los dos objetivos nutricionales. 

Ingerir líquidos abundantes con frecuencia (más de 2 litros al día), repartidos en pequeños volúmenes, y si contienen sales y azúcar mejor, porque contribuirán a reponer la pérdida producida por la diarrea, que no está formada solo por agua. Puede tomar limonada, infusiones no estimulantes con azúcar y limón, caldo de arroz con sal o soluciones de rehidratación oral, tanto comerciales como elaboradas.

Solución de rehidratación oral casera: una limonada alcalina con 1 litro de agua potable hervida o mineral que no sea de baja mineralización. Mezclar con el zumo de dos limones, 2 cucharadas soperas de azúcar, 1 cucharada de postre de sal y la punta de un cuchillo con bicarbonato.

Si no fuera posible tomar una cantidad suficiente de bebidas por vía oral para compensar las pérdidas, es posible que sea necesario optar por sueros por vía subcutánea o intravenosa. El profesional sanitario será quien lo determine. 

Entre pocas horas y un día después de iniciar la rehidratación, en función de la intensidad de la diarrea, se debe iniciar la toma de alimentos que ayuden a mejorar la diarrea, además de aportar los nutrientes necesarios.  

Recomendaciones:

o    Comer al menos 6 veces al día cuando se tenga algo de apetito comidas poco abundantes. 
o    Tomar los alimentos templados, evitando temperaturas extremas. 
o    Reducir los residuos, evitando frutas y hortalizas con piel y legumbres, verduras y frutos secos y tomar como alimentos proteicos pescado blanco hervido, pollo sin piel cocido o jamón cocido sin grasa. 
o    Tomar alimentos ricos en fibra soluble, que regula el tránsito, como la manzana pelada, el plátano, membrillo, patata, zanahoria y arroz cocido. 
o    Tomar alimentos sin fibra como pasta, sémola, pan blanco tostado, etc.
o    Reducir la grasa: tomar los yogures naturales (no de sabores) desnatados, limitar el aceite, evitar los fritos, embutidos, precocinados, natas, etc. 
o    Evitar bebidas con efecto laxante: café, té, bebidas con alcohol, zumo de naranja, chocolate, leche entera, refrescos de cola, bebidas con gas en general, etc. 
o    Según el tipo de diarrea, tomar los lácteos desnatados con probióticos y evitar algunos edulcorantes del tipo maltitol, sorbitol, xilitol, etc., puede ayudar.